Consolidación del pensamiento militar
venezolano
deisy
satine
“El amor por la patria, si es verdadero, a uno lo lleva, incluso si es necesario,
a dar la vida misma por ella, porque la vida nuestra es transitoria; la de la patria debe ser eterna y tiene que ser una patria grande, hermosa, libre, desarrollada”
Hugo Rafael Chávez Frías
La
primacía en la
elaboración de la necesidad de una concepción que visualizara a las
comunidades de origen hispano,
asentadas en el
hemisferio, como una
gran nación y,
al espacio que
ellas ocupaban, como un gran país, sin dudas le corresponde al
Generalísimo Francisco de
Miranda. No nació esta idea de las infraestructuras presentes en lo que
al momento eran colonias de Madrid. Germinó de la práctica que ya se perfilaban
de la lucha de las
grandes potencias por
el poder mundial.
Una contienda de
la cual él
era un actor protagónico. De modo que su
planteamiento estaba más relacionado con el orden mundial que con la
organización del mundo iberoamericano. Cuando se lee el Acta de París (22 de
Diciembre de 1797), que se anexa a este ensayo, se puede inferir de ella que la
proposición que formuló ante
el Primer Ministro
Británico William Pitt
y al Presidente
Norteamericano John Adams,
contenía una especulación que estaba vinculada a la búsqueda de un balance
en la
política internacional en el
marco de
una multipolaridad. Ideas
por supuesto que
no formaban parte
del léxico político
de la época
y dentro de
la cual la
conflictividad internacional no se planteaba por el control de espacios
sino por el control del mercado.
La proclama de 1810 para la
defensa de la provincia de Caracas, constituye el primer capítulo del nuevo
pensamiento militar que reemplazará la doctrina de seguridad nacional. El
monopolio de la fuerza a través de los órganos armados, lo que según la vieja
doctrina era potestad exclusiva del Estado, pasa a ser una facultad de la
Fuerza Armada y el pueblo, gracias a la corresponsabilidad del Estado y la
sociedad en la defensa de la nación consagrada en la Constitución. Entre la
proclama y la doctrina de seguridad nacional, Venezuela pasó de tener una
concepción en la que era obligación de todos participar en la defensa del
Estado a la constitución de un estamento militar profesionalizado que tenía “el
señorío de las actividades de defensa”. El documento apunta que la “élite
profesional” de las Fuerzas Armadas se dedicó a mantener el orden interno y la
seguridad de las fronteras para lo cual neutralizaba a “las fuerzas
irregulares”. En el texto se destaca la desaparición de las milicias que se
constituían en los estados de la Federación. Este “pensamiento positivista” es,
según los autores, lo que debe ser revisado a la luz de la situación actual.
La lucha contra un imperio no es
una novedad para la historia militar de Venezuela, y por ello la Independencia
del país constituye un ejemplo central en el nuevo pensamiento militar: “Fue la
concreción de lo que hoy llamaríamos unidad cívico– militar. Lo que actualmente
permite el desarrollo del concepto de defensa integral”. Según el documento,
las batallas de la gesta de Independencia representan situaciones de guerra
asimétrica similares a las que enfrenta actualmente el Estado venezolano. De
acuerdo con una de las definiciones planteadas a lo largo del texto, se trata
de un enfrentamiento entre “un actor con ingenios bélicos avanzados, frente a
otro con armas y equipos clásicos”. Como una forma de prevalecer en estos
escenarios, el nuevo pensamiento recurre a las estrategias del general José
Antonio Páez en la batalla de las Queseras del Medio –donde profirió la célebre
frase “Vuelvan Carajo” – y la batalla en un campo descentralizado representada
por la campaña de Carabobo. “Efectivamente, se está ofreciendo como solución práctica
al conflicto actual venezolano, ideas que jalonaron las etapas iníciales en las
cuales se integró el país y se cohesionó la sociedad para permitir la formación
del Estado (...) pero en realidad, tal meta estrategia está más vinculada con
el futuro que con el presente y el pasado de la vida de la nación”.
de reforma constitucional anunciado por
el presidente Hugo Chávez Frías el 12 de agosto de 2006, se enmarca en la
necesidad de transformar la estructura del Estado venezolano para adecuarla al
planteamiento de una nueva y deseada realidad socialista. En este sentido, la
modificación de 69 artículos de la Constitución atiende una considerable
cantidad de temas entre los que destacan: el replanteamiento del pensamiento
militar y la constitución de la Fuerza Armada Nacional Bolivariana (FANB). De esta
manera las instituciones militares han respondido a los intereses del pueblo,
en lucha contra las injusticias y los intentos de dominio promovidos por los
grandes centros hegemónicos del poder mundial, la reforma
plantea dos grandes ejes teóricos como fundamento de la FANB: el ideario
político-filosófico del Libertador Simón Bolívar, y la visión integral de la
seguridad y defensa consagrada en la Ley Orgánica de Seguridad de la Nación
(LOSNA).
La adopción del pensamiento bolivariano
en la propuesta de conformación de la nueva FANB pretende contribuir al
desarrollo de un ideario antiimperialista y profundamente social. Bolívar
defendió con ahínco la independencia y la dignidad del pueblo venezolano, así lo
demuestra su comunicación al enviado del gobierno estadounidense, B. Irving,
para responder a la intromisión de Estados Unidos (EEUU) en tierras
venezolanas:
Defendiendo los derechos de Venezuela
contra la España ha desaparecido una gran parte de nuestra población, y el
resto que queda ansía por merecer igual suerte (…) lo mismo es para Venezuela
combatir contra la España que contra el mundo entero si todo el mundo la ofende
(Bolívar, 1818). Bolívar había logrado identificar
en el gobierno de EEUU un elemento de perturbación y desestabilización para el
desarrollo de los pueblos de América Latina. El Libertador se preguntaba, en
relación a ese gobierno y sus prácticas en contra de Venezuela “¿Qué hermanos
son esos los del Norte…?”, al darse cuenta de que no había esperanza de
entablar unas relaciones respetables con el gobierno estadounidense (Chávez,
2005). Asimismo recomendaba que “había que tener la mayor vigilancia sobre esos
americanos (estadounidenses) que frecuentan
las costas: son capaces de vender a Colombia por un real” (Bolívar, 1818). La sagacidad del Libertador le permitió
manifestar, en carta dirigida a Tomas Revenga, que “jamás conducta ha sido más
infame que la de los norteamericanos con nosotros: ya ven decidida la suerte de
las cosas, y con protestas y ofertas, quien sabe si falsas, nos quieren
lisonjear para intimar a los españoles y hacerles entrar en sus intereses”
(Bolívar, 1820). Este conjunto de declaraciones revelan la carga
antiimperialista que sostenía el ideario bolivariano, que ahora sirve de
sustento para la formulación de la FANB como un órgano “patriótico, popular y
antiimperialista” (Proyecto de reforma constitucional, 2007). Asimismo, el pensamiento bolivariano aplicado
a la constitución de la FANB está colmado de una profunda carga social. La
obligatoria correspondencia que según el Libertador debía existir entre el
soldado y el pueblo, eran y son elementos fundamentales para el desarrollo y
libertad de la patria: “un soldado no adquiere ningún derecho para mandar a su
patria. No es el árbitro de las leyes ni del gobierno; es el defensor de su
libertad” (Bolívar, 1814). La necesaria relación entre el ejército y las y los
ciudadanos, junto con la necesaria participación del pueblo en el mantenimiento
de la seguridad y defensa integral de la nación, se enmarcan hoy en el
nacimiento de la nueva doctrina militar de la revolución venezolana.
El otro eje teórico utilizado en el
planteamiento de reforma constitucional es la visión integral de la seguridad y
defensa nacional. El primero de estos conceptos se encuentra desarrollado en la
LOSNA en su artículo segundo, el cual establece que: La seguridad de la Nación, está fundamentada
en el desarrollo integral, y es la condición, estado o situación que garantiza
el goce y ejercicio de los derechos y garantías en los ámbitos económico,
social, político, cultural, geográfico, ambiental y militar, de los principios
y valores constitucionales por la población, las instituciones y cada una de
las personas que conforman el Estado y la sociedad, con proyección
generacional, dentro de un sistema democrático, participativo y protagónico,
libre de amenazas a su sobrevivencia, su soberanía y a la integridad de su
territorio y demás espacios geográficos (LOSNA, 2002) La visión de integralidad que se le imprime
al concepto de seguridad de la nación, entendida ésta como un fin, también se
refleja en la concepción de la defensa nacional, definida en el artículo 3 de
la LOSNA como: … el conjunto de
sistemas, métodos, medidas y acciones de defensa, cualesquiera sean su
naturaleza e intensidad, que (…) ejecute el Estado con la participación de las
instituciones públicas y privadas, y las personas naturales y jurídicas,
nacionales o extranjeras, con el objeto de salvaguardar la independencia, la
libertad, la democracia, la soberanía, la integridad territorial y el desarrollo
integral de la Nación.
Todos estos cambios buscan promover el
“nuevo pensamiento militar”, que se lograría según palabras del presidente
Chávez haciendo “una revolución militar dentro de la Fuerza Armada Nacional,
que cambie el paradigma norteamericano que nos inculcaron” (Chávez, 2007). Tal revolución se lograría, además, Rescatando el pensamiento militar
originario de los soldados de Venezuela; Miranda, Sucre, Bolívar, Páez y Zamora
(…) el cual era un pensamiento antiimperialista, pensamiento republicano,
pensamiento nacionalista, integracionista, pacifista y libertario, de unidad
cívico militar de patriotismo verdadero, de entrega, de sacrificio, de virtudes
supremas (Chávez, 2005).
ANALISIS
Se ha
considerado necesario crear y consolidar un nuevo pensamiento militar para sus
Fuerzas Armadas, reestructurándolas en todas sus instancias con base en la
nueva constitución bolivariana para que las mismas y a partir de su preparación,
adiestramiento, equipamiento y adoctrinamiento, puedan ser determinantes en el
apoyo de sus pretensiones geopolíticas. Sin embargo, esta ha sido la primera
vez en toda su historia, que las Fuerzas Armadas Venezolanas se han visto
obligadas a romper con los conceptos ideológicos que prevalecieron en ese País,
tradicionalmente Liberal, Social Cristiano y Social Demócrata, para / y como ha
ocurrido en los últimos años-, apoyar la concepción de un Estado Socialista,
lógicamente con proyectos radicalmente diferentes en todos los aspectos
incluyendo el Militar.
No obstante las respuestas
oficiales y diplomáticas, Chávez se dirigió directamente al pueblo de
Venezuela, el programa Aló Presidente (20-03-05) y pidió "asumir una
actitud de defensa nacional integral, a fin de preservar su soberanía ante
naciones como Estados Unidos". Esto pasa por una visión estratégica de la
nación, de dejarle claro al mundo que, los venezolanos, vamos a "defender
el espacio territorial. En especial las reservas petroleras".
Los pensamientos militar de Venezuela, no es otra cosa que el
renacer de los valores rectores que guiaron nuestros libertadores en la gran
gesta americana. Para lograr este propósito el presidente Chávez pidió,
desterrar para siempre " pensamientos imperialistas de la mente de
nuestros soldados" para establecer la doctrina originaria de los ejércitos
venezolanos originaria de los soldados venezolanos, "que no es otra que la
doctrina de Miranda, Sucre y del padre de la patria, Simón Bolívar, Chávez ha
descrito tres valores como fundamento del rescate institucional: Lealtad
inquebrantable, Libertad, Igualdad, Fraternidad, Defensa de la patria y
Soberanía. Es decir, la doctrina de la liberación, el nacionalismo liberador, y
de la unión del soldado con su pueblo".
Para poder
lograr resultados diferentes, obviamente es necesario hacer cosas diferentes.
Por lo tanto, hay que considerar que existen una serie de factores importan‐ tes que se deben modificar si se quiere lograr un
fortalecimiento del pensamiento militar venezolano. Cónsono con los planes de
la Nación y coherente con las políticas de Estado, resulta imperativo generar
cambios trascendentales en el seno de la Fuerza Armada Nacional Bolivariana
relacionados con la eliminación de los privilegios, la responsabilidad, el
compromiso, la tríada ser‐hacer‐conocer, impulsar el desarrollo integral, físico y
mental, seguir los lineamientos del Comandante en Jefe, resaltar las
diferencias entre la vieja cultura militar y la cultura militar contemporánea,
fortalecer los mecanismos de integración Pueblo y Fuerza Armada, promover la
coherencia entre el mensaje y la acción, y por último, se presenta una
propuesta de un enfoque psicológico alternativo que integre las categorías
estudiadas a fin de lograr el fortalecimiento del pensamiento militar
venezolano. Descriptores: Pensamiento militar. Integración pueblo y Fuerza
Armada.
Principales
fuentes consultadas:
BOLIVAR, S. (1818): Carta a B. Irving,
agente de EEUU, en Venezuela, 7 octubre
de 1818; Vol. I, en: http://www.holamigente.org/simonbolivar/elpatriota.rtf,
(recuperado el 29/10/2007).
BOLIVAR, S. (1820): Carta a Tomas Revenga,
Secretario General, en Venezuela, 25 de
mayo de 1820, en:http://www.aporrea.org/tiburón/a28306.html, (recuperado el
29/10/2007).
BOLIVAR, S. (1814): Discurso en el Convento de
Franciscanos de Caracas, 2 este, de 1814; Vol. II, en:
http://www.holamigente.org/simonbolivar/elpatriota.rtf, (recuperado el
29/10/2007).
CHAVEZ, H. (2005): Año del salto
adelante. Hacia la construcción del socialismo del siglo XXI. Selección de
discursos del Presidente de la República Bolivariana de Venezuela Hugo Chávez
Frías. Ediciones de la Presidencia de la República. Caracas, Venezuela.
CHAVEZ, H. (2005): Chávez ratifica que
la nueva Fuerza Armada es "antiimperialista y anticolonialista", http://www.unionradio.com.ve/Noticias/Noticia.aspx?noticiaid=140779,
(recuperado el 09/10/2007).
CHAVEZ, H. (2007): Es necesario romper
paradigma norteamericano en la Armada venezolana, en:
http://www.aporrea.org/tiburon/n102451.html, (recuperado el 09/10/2007).
CONSTITUCIÓN DE LA REPÚBLICA BOLIVARIANA DE VENEZUELA (1999). Gaceta Oficial Nº 36.860, del 30 de diciembre de 1999, reimpresa por errores material del ente emisor en la G. O. Nº 5.453 extraordinario , de fecha 24 de marzo de 2000, con enmienda Nº 1 del 15 de febrero del 2009
DIETERICH, H. (2005): Defensa integral de la
Nación. Nace la Doctrina Militar de la Revolución Bolivariana. Ámbito Cívico
Militar, Nº 2, 78, 80.